I could've held on to your heart...".
Robert, at al, breaking pictures apart.
Palabras Correctas.
Diría que se me terminaron las palabras, pero ni yo soy tan ingenuo. Es sólo que todas las que tengo describen sus ojos y el recuerdo de su beso. ¿Para qué usarlas ahora, otra vez, entonces?
No me gusta cuando las palabras se visten de pretextos, aunque sean razones. No las doy, ni las cargo conmigo. No me asumo culpable cuando el juez de mí no soy yo. No te culpo cuando los crímenes son comunes a ambos.
He visto tesoros silenciosos, y los guardo en un cofre de carne y huesos. Nunca romperé un silencio si no sirve un propósito, si no es para decir 'te quiero'; si no es para reclamar justicia o matar un monstruo inoportuno. Si me pides que guarde silencio lo haré sumiso; si me exiges callar gritaré más fuerte que tú.
No, lo que me falta es un tema, una razón que no sea un sollozo estúpido, una queja ridícula. Otro que no sea mi pecho drenado de sangre. Otro, que no gimotee sobre sueños muertos.
Necesito palabras con olor a sábana; epítetos de ebrio feliz, carcajadas horribles en lugares que la luz tema. Quiero palabras como 'pecado' y 'amnesia'; refinadas obscenidades; palabras que quemen y que mojen.
Quiero lanzar risas de mis manos, como ases y cuatros y reinas de espadas, de bordes afilados pero dibujos asombrosos.
Y quiero tomar también esta tristeza, obstinada en volver, y escribirla coraza; y no dejar que nadie más visite mi celda, ni el mismo día en que me cuelguen por pura lástima.
Balbucear sobre héroes formidables. Vomitar el ácido de mil monstruos horribles. Nada que ver con miradas lánguidas y rosas de fuego prendiendo en sabe qué partes corporales. No más saborear nombres inverosímiles, ni ojos que derriten los barrotes de la jaula. No más, nunca más, labios suculentos ni lenguas intrépidas.
No quiero sentir nada si no soy sentido a mi vez.