"...y aunque el dolor es espeso,
se diluirá con un beso
que me demuestre que tú
no eras mucho más que eso..."
J. M. Cano.
Otra Vuelta. (He visto el Futuro).
He visto el futuro, y no estás en él.
Es oscuro, es húmedo y estoy cansado, pero río sardónico.
Es hora entonces de seguir mis propios consejos frienzoneados, y activar la Venganza Indiferente. Las víctimas serán pocas, todas voluntarias, pero caerán y será en tu honor y por tu culpa.
Porque cumplo mis promesas en lo posible, tu nombre insólito será el último que pronuncie. Pero moriré como vine al Mundo, y como he vivido esta vida; eso lo sé mañana.
Ni tú ni yo tenemos remedio, y eso lo ví en el tiempo. Tu ausencia era una figura de cartón, sombra y silueta vacía de todo el amor que no quisiste.
Y en esa vida dejé de culparme, porque era verdad que no era yo, sí eras tú. Pensé que era el único ciego.
Pero no soy el único, cariño, que tuvo oportunidades como peces dorados. Y son tan resbaladizas.
No hay reproches, sólo te abandono a tu mala suerte; pero deja descansar tus labios en lo que atañe a lo que no quieres y pudo ser tuyo. Yo sabré cómo y si lo uso, y con quién, de hoy... hasta mañana.
Adiós, amor.
Hola, amiga.
¿Cómo has estado?